Greenpeace advierte: El gobierno planea inyectar medidas para reducir las emisiones de las centrales eléctricas de gas.
“Los partidos de la coalición están unidos en su apoyo a la legalización de la captura y almacenamiento de carbono (CAC) en las centrales eléctricas de gas. Al hacerlo, ignoran las graves preocupaciones planteadas en el Bundesrat (Consejo Federal) y en las comisiones que se ocupan de la legislación”, advirtió el miércoles Sophia van Vügt, experta en política climática y energética de Greenpeace. El Bundestag tiene previsto debatir el proyecto de ley de almacenamiento de carbono en segunda y tercera lectura el jueves. “Se está imponiendo a toda costa una tecnología arriesgada que cuesta miles de millones, ignorando todas las objeciones razonables, para que la industria del gas no tenga que cambiar su modelo de negocio”, advirtió la experta de Greenpeace.
El acuerdo de coalición entre los grupos parlamentarios del SPD y la CDU/CSU incluye un paquete legislativo destinado a reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2), un gas de efecto invernadero, en particular las procedentes del sector industrial, que son difíciles de evitar, y las de las centrales eléctricas de gas. Los socios de la coalición manifestaron explícitamente su intención de aprobar esta legislación «inmediatamente después del inicio de la legislatura». Esta tecnología, conocida como Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC), es controvertida porque sus consecuencias para la naturaleza, el aire y el medio ambiente se consideran impredecibles, especialmente debido al riesgo que suponen las fugas de CO2.
Además, los ecologistas critican especialmente el hecho de que se contemple la posibilidad de la captura y almacenamiento de carbono (CAC) en centrales eléctricas de gas natural, anulando así el efecto de las cuotas de emisión hacia la reducción progresiva de las emisiones de CO2. El gobierno alemán ya está planificando la construcción de nuevas centrales eléctricas de gas natural. Estas centrales están diseñadas para compensar, en un modo de reserva flexible, los futuros periodos de baja generación eléctrica, ya sean previstos o inminentes, debido a la insuficiencia de energía eólica y solar.
«El almacenamiento de carbono es similar a la peligrosa exageración que rodea a las inyecciones para adelgazar: no aborda las causas profundas del problema, solo sus efectos», afirmó van Vügt. Las plantas de captura y almacenamiento de carbono (CAC) también son «extremadamente caras e ineficientes» en los pocos casos en que ya se utilizan. Greenpeace, junto con otras organizaciones ecologistas e iniciativas ciudadanas, planea una manifestación frente al Bundestag contra la aprobación de la Ley de Almacenamiento de Carbono.
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