Política. Contaminación acústica en el transporte: un informe del Senado advierte sobre molestias ignoradas.

La población francesa está ampliamente expuesta al ruido del transporte. Los efectos negativos de esta contaminación acústica son bien conocidos, pero esta «está lejos de ser una prioridad para las autoridades públicas», según un informe del Senado publicado este miércoles.
Es la segunda causa principal de muerte relacionada con la contaminación en la Unión Europea, y millones de franceses están expuestos a ella: el ruido excesivo. Se puede encontrar prácticamente en cualquier lugar —cerca de una obra, junto a un bar o incluso en una escuela—, pero el tráfico rodado, ferroviario y aéreo son, sin duda, las fuentes más importantes de contaminación acústica.
Casi la mitad de la población está expuesta al ruido del transporte en casa o en el trabajo, según una encuesta encargada por la Comisión de Ordenación del Territorio y Desarrollo Sostenible del Senado, que presentó un informe sobre el tema este miércoles. Trastornos del sueño, enfermedades cardiovasculares, obesidad, diabetes, dificultades de aprendizaje... Esta contaminación acústica tiene numerosos impactos en la salud, pero también en la economía (pérdida de productividad, depreciación de la propiedad, etc.).
Casi 100.000 millones de euros de costes cada añoEn 2021, Ademe y el Centro Nacional del Ruido estimaron el coste social de la contaminación acústica en 147 000 millones de euros anuales. El ruido del transporte por sí solo representa dos tercios de este coste social (el 54,8 % del cual proviene únicamente del tráfico rodado). Sin embargo, el problema «está lejos de ser una prioridad para las autoridades públicas», según los ponentes Gilbert-Luc Devinaz (Partido Socialista) y Guillaume Chevrollier (LR).
Los dos senadores señalan, en primer lugar, los parámetros de referencia "inadecuados" en Francia, con un umbral de exposición nociva para la salud (un nivel medio de ruido de 55 decibelios) inferior al establecido por la Organización Mundial de la Salud (de 45 a 54 decibelios, según el medio de transporte). La normativa francesa es "extremadamente compleja", lamenta Gilbert-Luc Devinaz, diputado electo por la región del Ródano. Confusa y anticuada, no siempre se respeta, como lo demuestra el procedimiento de incumplimiento iniciado por Bruselas en relación con los PPBE (planes de prevención del ruido ambiental), que se rigen por una directiva europea.
"Nos damos cuenta de que realmente no hay un piloto en el avión", continúa el senador. Pide la creación de una "policía del ruido" digna de ese nombre, ya que la gobernanza de la prevención está actualmente dispersa, por no decir completamente infrafinanciada. "Debemos garantizar que las leyes vigentes se apliquen eficazmente", añade su colega Guillaume Chevrollier. Según él, el informe debería "alimentar el debate público" e incluso dar lugar a legislación.
Otras medidas recomendadas incluyen la implementación de un plan para proteger a las poblaciones más expuestas, junto con un inventario exhaustivo de puntos negros de ruido (NBS), la extensión de los toques de queda vigentes en ciertos aeropuertos (Toulouse, Nantes, Orly) y el despliegue de radares de ruido en toda Francia. Estos detectores, aún en fase experimental, tienen como objetivo penalizar a los vehículos excesivamente ruidosos «en rutas muy específicas», señala Guillaume Chevrollier.
Por otro lado, la LR elude la cuestión de las zonas de bajas emisiones (ZFE). Su abolición acaba de ser votada en la Asamblea por la derecha y la extrema derecha, a pesar de que, según Ademe, es una de las principales palancas para combatir la contaminación atmosférica y acústica.
En su plan de acción de "contaminación cero", la Comisión Europea se propuso reducir en un 30 % el número de personas afectadas crónicamente por el ruido del transporte para 2030, en comparación con 2017. Sin embargo, incluso si Francia y la UE adoptaran medidas sustanciales en los próximos años, seguiría siendo imposible alcanzar este objetivo, advirtió la Agencia Europea de Medio Ambiente en marzo. Por el momento, prevé una reducción del... 2 %.
Le Journal de Saône-et-Loire