Conferencia de los Océanos: En Niza, Macron llama a la "movilización" y anuncia que se ratificará el tratado sobre alta mar

«Si la Tierra se calienta, el océano hierve». Emmanuel Macron llamó a la «movilización». Este lunes 9 de junio, en la inauguración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos en Niza (sureste de Francia), «La primera respuesta es, por tanto, el multilateralismo», declaró el presidente francés, antes de insistir: «El clima, al igual que la biodiversidad, no es una cuestión de opinión, sino de hechos científicamente comprobados».

También confirmó que el Tratado de Alta Mar , cuyo objetivo es proteger las zonas más allá de los 370 kilómetros de la costa, será ratificado por suficientes países para entrar en vigor. "Además de las cincuenta ratificaciones ya presentadas aquí en las últimas horas, quince países se han comprometido formalmente a adherirse", explicó. "Esto significa que se ha alcanzado el acuerdo político, lo que nos permite afirmar que este Tratado de Alta Mar se implementará correctamente. Por lo tanto, es un hecho consumado". El tratado entrará en vigor 120 días después de la 60.ª ratificación, el número mínimo necesario, sin que el presidente francés especifique una fecha. Inicialmente, Francia pretendía obtener estas 60 ratificaciones para la Conferencia de Niza.

Durante más de quince años, Estados de todo el mundo han intentado negociar un texto que regule la gobernanza de la alta mar, esta vasta extensión que representa el 64 % de la superficie oceánica total y el 45 % del planeta. En marzo de 2023, el Tratado Internacional para la Protección de la Alta Mar y la Diversidad Biológica Marina fue adoptado por unanimidad por los Estados miembros de la ONU .

Incluye varias disposiciones: la creación de áreas marinas protegidas a gran escala para hacer frente a la presión ejercida por las actividades humanas y el cambio climático; la obligación de los Estados y las empresas privadas de realizar estudios de impacto de sus actividades con miras a explotar esas aguas; el reparto “justo y equitativo” del acceso y la comercialización de los recursos genéticos marinos y sus datos de secuenciación.