Del activismo al periodismo: el denunciante belga sobre contaminantes eternos continúa la lucha

En esta soleada tarde de mediados de julio, Thomas Goorden cambia su camisa de lino por una chaqueta dorada. En la agenda: renovar el granero de las Ardenas que adquirió su primo Pieter en 2019. Por primera vez en años, el exactivista belga, que expuso uno de los mayores escándalos de contaminación por PFAS de Europa, sustancias químicas sintéticas que persisten casi indefinidamente en el medio ambiente, se permite tomar un poco de aire fresco. Irónicamente, el granero de su primo se encuentra a pocos kilómetros de los dieciséis municipios (doce en las Ardenas y cuatro en el Mosa) que tienen prohibido el consumo de agua del grifo debido a la concentración de estos llamados contaminantes eternos, cancerígenos para humanos y animales.

Tras convertirse en periodista independiente en octubre de 2024, Thomas Goorden deja atrás casi diez años de activismo. Originario de Amberes (Bélgica), este hombre de 47 años comenzó estudiando minuciosamente las publicaciones administrativas de su ciudad natal para influir en la política local, antes de involucrarse en el movimiento ciudadano amberino stRaten-Generaal, que aboga por una democracia más participativa. Sin embargo, no fue hasta 2021 que su nombre se dio a conocer más allá de las fronteras del municipio más grande de Flandes.

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