El incendio que se inició en Sigean, en la región de Aude, se ha estabilizado tras arrasar 630 hectáreas de vegetación.

El violento incendio que se declaró el sábado 26 de julio en la costa mediterránea de Aude fue contenido y estabilizado el domingo por la mañana después de devastar 630 hectáreas de vegetación y dañar gravemente dos casas.
En esta zona, azotada por la sequía, el calor intenso y los vientos constantes, el riesgo de incendio sigue siendo muy alto el domingo, según declaró a la AFP el subprefecto de Aude, Rémi Recio. Más de 630 bomberos y 180 vehículos terrestres siguen movilizados para controlar el incendio, que se está consolidando, añadió.
Los bomberos combatieron toda la noche en los puntos donde se inició el incendio para canalizarlo , logrando estabilizarlo y contenerlo en una zona sin viviendas, añadió. Esperan poder contener el incendio durante el día con el apoyo, a partir de las 9:30 h, de dos helicópteros Canadair y dos hidroaviones, un despliegue aéreo reducido en comparación con el sábado, ya que otros departamentos se encuentran en alerta máxima.
Pero se esperan ráfagas de viento de hasta 80 kilómetros por hora a última hora de esta mañana, añadió, y pidió civismo y responsabilidad.
Diez viviendas, dos campings y una urbanización evacuadosEl incendio se desató la tarde del sábado en Sigean, localidad situada a unos veinte kilómetros al sur de Narbona, antes de extenderse rápidamente por una zona de monte bajo y vegetación seca, avivado por fuertes vientos de hasta 70 km/h. Arrasó 630 hectáreas de vegetación en dirección a Port-la-Nouvelle y La Palme, dos localidades costeras populares entre los turistas que viajan a España.
En la comuna de Sigean, dos casas resultaron gravemente dañadas por las llamas, una de las cuales quedó prácticamente destruida, según la misma fuente. No se registraron heridos graves, y aunque cuatro bomberos sufrieron inhalación de humo, pudieron regresar a sus hogares el domingo. Como medida de precaución, el sábado se evacuaron unas diez viviendas en Sigean, así como dos campings y una urbanización en Port-la-Nouvelle, donde el incendio se propagó por la noche.
Sin embargo, todos los residentes y turistas pudieron abandonar los gimnasios en los que se encontraban alojados temporalmente y regresar por la tarde a sus casas y campings.
Debido a la presencia de una línea de alto voltaje debajo de las zonas de caída, el sábado por la noche se cortó el suministro eléctrico a 5.000 hogares en Port-la-Nouvelle, pero el suministro se restableció el domingo.
Otro incendio a principios de mesEl incendio habría comenzado al borde de la autopista A9, que une el valle del Ródano con España, según el subprefecto de Aude.
Esta importante ruta vacacional permaneció abierta al tráfico, pero el incendio provocó hasta 15 kilómetros de atascos, bloqueando el paso a conductores y turistas durante horas la noche del sábado. Sin embargo, la D6009 permaneció cerrada al tráfico el domingo junto a la Reserva de Vida Silvestre Africana de Sigean, que no se vio afectada.
El subprefecto de Aude reiteró este domingo a la AFP su llamamiento a la "prudencia y a la moderación" , lamentando que la policía tuviera que multar el sábado por la noche en La Palme a un hombre que "tiró una colilla por la ventanilla" de su vehículo delante de ellos .
Este último desastre se produce menos de un mes después de que el departamento de Aude sufriera un gran incendio, provocado por un coche en llamas en la autopista, que afectó 2.100 hectáreas cerca de Narbona . Movilizó a 1.000 bomberos, que combatieron las llamas durante toda la noche del 7 al 8 de julio.
Otro, que había recorrido 400 hectáreas en la región de Corbières los días 29 y 30 de junio, fue provocado por un vendedor ambulante cuyo remolque transportaba una barbacoa mal apagada por la carretera. Fue acusado y puesto en prisión preventiva.
El mundo con AFP
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